Sabedor de sus pinitos como entrenador, el Bilbo femenino le pidió a Leandro si podía ayudar en el cargo junto con Ión del equipo, logrando el campeonato de liga y copa Vasca y jugando la fase de ascenso a División de Honor en Cordoba, donde el equipo cayo en semifinales.
La temporada siguiente, nuevamente campeonas y a jugar la fase final en Collado Villalba (Madrid), y a pesar de estar hasta la última jornada con opciones no pudo ser. Etapa donde guardo muy grandes y gratos recuerdos de unas jugadoras comprometidas y sobre todo grandes personas.